domingo, 16 de septiembre de 2012

DONOSTIA-SAN SEBASTIÁN, ¿SISMICIDAD DE EFECTO LOCAL?

AL MENOS CUATRO VECES DURANTE EL SIGLO XX: 1903. 1923, 1929 Y 1967, SAN SEBASTIÁN SE HA MOSTRADO COMO UN FOCO DE REPETICIÓN DE LAS ONDAS SÍSMICAS CON MÁS O MENOS INTENSIDAD.  SIEMPRE BAJO ESE PATRÓN MUESTRA UN EFECTO LOCAL DE AMPLIFICACIÓN Y REPETICIÓN, ALFONSO REY PASTOR LO ADVIRTIÓ EN 1931 AL ESTUDIAR LOS TERREMOTOS DE LA CANAL DE BERDÚN DE 1923 Y DE LA RIOJA BAJA DE 1929, ENTONCES ÉL LO DENOMINÓ "EL EFECTO DE FOCO PERIFÉRICO DE SAN SEBASTIÁN".




PRESENTACIÓN DEL ESTUDIO EN LAS VIII JORNADAS SOBRE GERENCIA DE RIESGOS Y EMERGENCIAS CELEBRADA EL DÍA 29 DE MAYO DE 2014 EN SAN SEBASTIÁN



La Península Ibérica no se sitúa en una de las zonas sísmicas más activas de Europa, pero tiene una peligrosidad sí­smica significativa. Para mitigar esta peligrosidad es necesario conocer mejor las fallas activas o las aún por descubrir, sus velocidades, y los periodos de recurrencia de los terremotos que puedan generar, una labor que ni el sector de la construcción ni las administraciones han considerado de interés. 

La debilidad de la estabilidad institucional y política ha subestimado la importancia de la aplicación de la seguridad sísmica, aunque una y otra vez vuelva a hacerse pública. Hoy el área metropolitana de San Sebastián aglutina a cerca de 450.000 personas, más de cuatro veces las que vivían en 1967, cuando el terremoto de Arette impactó en la ciudad. Donosti ya ha mostrado al menos cuatro veces durante el siglo XX, que posee una configuración geológica peculiar capaz de amplificar y convertir su subsuelo en un foco repetidor de terremotos más o menos lejanos.


DONOSTIA-SAN SEBASTIÁN


1. INTRODUCCIÓN: TODO EMPEZÓ EN TXOMINENEA


Todo empezó en 2009, cuando un grupo de vecinos del donostiarra barrio de Txominenea, bastante preocupados, contactaron con el laboratorio de edificación. Habían estado buscando un especialista en geotecnia, ingeniero, geólogo, arquitecto o lo que fuese, que pudiera desvelarles el verdadero alcance de los peligros que yacían bajo sus viviendas. Ninguno con los que consultaron en Guipúzcoa tuvo el arrojo de al menos intentar abarcar el problema que vamos a comentar, puede ser que la sombra de las grandes empresas públicas y privadas a las que iban a tener que enfrentarse aquellos técnicos, por una más que manifiesta negligencia les echase para atrás, el clientelismo y el miedo a “molestar” a tan grandes corporaciones -nos comentaron más tarde- tuvo un peso específico destacable en ciertas decisiones técnicas. También Guipúzcoa a veces sufre ciertas dosis de caciquismo. 

PROPUESTA URBANÍSTICA PARA TXOMIN
Unos meses antes, una noche, varios edificios comenzaron a crujir, se oyeron como varias explosiones, algunos pensaron en un sismo, no era la primera vez que San Sebastián recibía un impacto, el territorio físico no sabe de fronteras administrativas, los mayores impactos recibidos por la ciudad siempre han venido de afuera, muchos ya los habían vivido en varias ocasiones. Salieron a la calle muy asustados, enseguida aparecieron las primeras grietas, siguieron una suerte de crujidos más suaves e intermitentes, en algunos edificios ya se veían deformaciones importantes. Al día siguiente no se hablaba de otra cosa. 


Pero no había sido un terremoto, un túnel a 35 m de profundidad para la nueva depuradora sufrió un accidente geotécnico no previsto, con cuatro sondeos y muy buena voluntad no se pudo abarcar tamaña campaña geotécnica y colapsó hacia sí mismo; durante días y semanas se estuvo “aspirando” agua, arena, grava..., esa retirada de terreno y descenso del nivel freático en un ambiente de estuario y desde abajo, acabó por producir fenómenos de hundimiento del terreno y subsidencia que afectaron a la estación de RENFE, a infraestructuras cercanas en el Paseo de Aintzieta y a 116 viviendas de Txominenea al completo. En el Carmel, en Barcelona, recordemos, todo empezó así. En Txominenea nadie dijo nada hasta que el ruido de los medios sacó a la luz el enorme problema, la negligencia y la vergonzosa actuación de las empresas implicadas ni siquiera sonrojó a algunos técnicos que con un cinismo inaudito y una insolencia inconcebible hablaban de unas viviendas que ya estaban en mal estado antes de comenzar. Nunca habían sufrido el más mínimo asiento o perturbación en sus más de 40 años. Otra vez se repetía el arquetipo: eran David contra Goliat.

Siguieron días en los que técnicos de varias empresas, aseguradoras, ayuntamiento, contratas, subcontratas, empleados de varios rangos preparando estudios someros enfocados a quitarse el muerto de encima, etc., pasaban incesantemente a medir grietas, hacer fotos; la prensa se hizo eco, ETB, Euskal Irratia, etc. Finalmente los vecinos se organizaron y comenzamos a estudiar a fondo el problema. Nada se sabía sobre las cimentaciones, el tipo, la profundidad, el estado después del accidente, era angustioso, muchos no pudieron dormir durante semanas, pero sí que teníamos información más que suficiente sobre el terreno del estuario del Urumea, un buen punto de partida.

Mientras tanto, interminables reuniones de técnicos, empresas públicas, administraciones locales, etc., no llegaban a ningún acuerdo, todo se reducía al coste final de la obra o al de las reparaciones, poner en peligro tantas vidas tenía en cada reunión un precio distinto; los vecinos sufrían la incertidumbre de qué iba a pasar con sus casas, las deformaciones continuaban, las grietas era cada vez más preocupantes. 

Comenzó un sonrojante capítulo de echar balones fuera por parte de los "culpables", cuanto más peligroso parecía más se notaba el "escaqueo"; en varios informes escritos en un lenguaje muy técnico pero muy cínico e insolente, se insinuó que las viviendas estaban condenadas dada su edad y calidad... Demostramos que eso no era verdad, así que finalmente entre todos y en un acto de verdadera buena voluntad por parte de los vecinos, acordamos con las empresas y el Ayuntamiento que Tecnalia se hiciera cargo, a la vista de todos los estudios, unos muy de parte y otros como los nuestros, más duros con los "culpables", muy escurridizos bajo el marco legal, por cierto.

Han pasado cuatro años, pero aún Tecnalia no ha finalizado sus conclusiones; depende de muchas cosas el que las termine. Cambios políticos, decisiones salomónicas repartiendo las responsabilidades al 50%, desconcertantes conclusiones que desafían al sentido común, mantienen el problema latente, los intereses de los inocentes habitantes de Txominenea han pasado a un segudo plano. Las empresas responsables prefieren que el tiempo acalle las protestas, los juicios, la razón, las soluciones, y alentan a una débil administración a mantenerse cómplice de sus intereses.

DIARIO DE NAVARRA 11-III-1903

Cuando no sabíamos, ni aún sabemos con certeza, si las cimentaciones pueden sufrir un impulso letal por la ejecución de más obras de infraestructura, reurbanizaciones, etc., llegamos a la conclusión de que los daños se podrían desencadenar no sólo por eso, sino que un pequeño movimiento sísmico podría desbaratar la estabilidad de las viviendas si algún pilote (ahora ya lo comprobamos) hubiera sufrido un tope estructural, por eso se deformaban sin acabar de terminar nunca los movimientos, pensamos. Cierto es que analizamos más factores, pero esa posibilidad de rotura de las cimentaciones ni Tecnalia la pudo comprobar al 100%.

Consultamos los terremotos del siglo XX y XXI en Guipúzcoa, no eran muy relevantes. Sin embargo, después de las irresponsabilidades administrativas y de la falta de ética y deontología que observamos y vivimos trabajando con algunas empresas y administraciones locales en la vecina Andoáin, y sobre todo después de ver las causas, ruinas, desgracias, daños inflingidos de por vida por similares actuaciones irresponsables de empresas de reconocido nombre, (y que incluso algunas cotizan en bolsa), se desataron en Lorca, nos vimos verdaderamente como en la leyenda de David contra Goliat.

La tragedia de esas actuaciones la experimentamos y estudiamos detenidamente durante semanas y meses en la ciudad del Sol. Tantas evidencias de especulación, de corrupción al fin y al cabo, nos llevaron a advertir a algunas autoridades del peligro que se hace correr a inocentes cuando así se actúa. En varias conferencias en Murcia, Guipúzcoa, Cantabria, Álava o Navarra venimos denunciándolo con insistencia, en nuestros artículos en congresos, revistas  y periódicos al respecto, somos ya demasiado machacones, pero parece que seguimos sin aprender estas lecciones. Una y otra vez repetimos los mismos errores.



Durante los concienzudos estudios de los caprichosos movimientos sísmicos murcianos a lo largo del siglo XX y del XXI, de los cuales es muy difícil extraer patrones de comportamiento para así conocer de antemano alguna pauta de previsibilidad del enemigo y saber por dónde defenderse, observamos también que hay circunscripciones que aún lejanas a los focos de los sismos, por ciertas características geomorfológicas y litológicas, son mucho más afectadas que otras más cercanas. Esto se pudo percibir en el laboratorio que supuso Lorca para muchos técnicos, fue muy bien estudiado y ya hay ríos de tinta al respecto.

¿Y si eso le pasaba a Txominenea? Cuál fue mi sorpresa al descubrir un patrón de comportamiento estudiando hemerotecas, hablando con los hijos y nietos de personas que vivieron temblores en primera persona en la ciudad donostiarra... El cómo los impactos vividos con algunos terremotos desencadenados más bien lejos, y no muy fuertes eran tan intensos en San Sebastián llamó mi atención.

Lo comprobé con los que vinieron desde Pamplona en 1903, desde Martes (Huesca) en 1923 ya advertido por Don Alfonso Rey Pastor en 1931, y desde Turruncún (La Rioja) en 1929, y el más fuerte, el de Arette de 1967. La sismicidad histórica está abriendo nuevos horizontes para el urbanismo, la arquitectura, la geología, las ciencias sociales... Ya no se puede obviar más que España es un país sísmico con 47 millones de habitantes analfabetos en esa cultura. El 100% de los fallecidos en Lorca y un porcentaje indeterminado pero presumiblemente alto de los heridos podría haberse evitado con una mínima formación de qué es lo que hay y no hay que hacer en caso de sismo, lo mismo ha vuelto a suceder en Emilia Romaña, como pasó en 2009 en l'Aquila. Un problema europeo, como tantos.


2. EL PATRÓN DE COMPORTAMIENTO: SAN SEBASTIÁN, UN  FOCO PERIFÉRICO DE LAS ONDAS SÍSMICAS


Fue en 1931, cuando Alfonso Rey Pastor describió por primera vez el fenómeno, después de realizar su estudio del terremoto de Martes de 1923, que presentó en ese año, observó el mismo patrón, pero mucho más claro que en 1929 presentaron las ondas sísmicas con el terremoto de Turruncún de la Rioja. La mejor forma de presentarlo es leyendo su propio texto, cuya belleza científica es merecedora de guardar en la memoria del patrimonio científico español, hoy repleto de científicos brillantes y tan de capa caída.


EXTRACTO DE LAS PÁGINAS 67 Y 68 DEL ESTUDIO DEL PERÍODO SÍMICO DE LA CANAL DE BERDÚN (PIRINEOS) (1923-1925) DE ALFONSO REY PASTOR EN 1931
EN 1957, CON MOTIVO DEL ESTUDIO DEL EPICENTRO DEL TERREMOTO DE LA CANAL DE BERDÚN DEL 15 DE FEBRERO DE 1956, D. JUAN MARTÍN ROMERO SUGIERE QUE EL FENÓMENO EN LA CIUDAD DONOSTIARRA PUDO REPETIRSE 33 AÑOS DESPUÉS, PERO ECHA DE MENOS UN ESTUDIO CONCIENZUDO DE LA DISTRIBUCIÓN DE DAÑOS, COMO VEMOS, NOSOTROS HOY EN PLENO SIGLO XXI ESTAMOS EN LA MISMA TESITURA  (ESTUDIO PRELIMINAR DEL SISMO DEL 15 DE FEBRERO DE 1956 EN LA CANAL DE BERDÚN POR JUAN MARTIN ROMERO INGENIERO GEOGRAFO, IGN).






El Gobierno Vasco ha presentado recientemente a los ayuntamientos el inventario y el diagnóstico de las necesidades de intervención del parque edificado. El trabajo, realizado por Tecnalia y las Escuelas de Arquitectura de San Sebastián y Madrid, ha consistido en la obtención de un inventario y diagnóstico a escala de sección censal, de las edificaciones residenciales construidas antes de 1980 y su entorno urbano. Con este inventario, primero que se realiza en Euskadi, se pretende poder definir las estrategias de rehabilitación y poder establecer las prioridades y estrategias de intervención.

Los parámetros de vulnerabilidad seleccionados han sido la vulnerabilidad social (origen, edad, formación. renta), estabilidad (antigüedad, estructura. tamaño), habitabilidad (superficie, dotaciones, ratio de habitantes), accesibilidad y eficiencia energética. Los indicadores que se han tenido en cuenta han sido 65. Sería oportuno y necesario incluir la vulnerabilidad a sismo dentro de la estabilidad general que se analice a partir de ahora, una labor que entre otras, debería estar mucho más controlada. Especialmente debería aplicarse a aquellos edificios construidos antes de 1968, cuando no había ningún criterio antisísmico a la hora de construir ni urbanizar.

Si las palabras de Alfonso Rey Pastor hubieran servido para advertir a las instituciones de la necesidad de aclarar este fenómeno y actuar de forma consecuente en la distribución de la ciudad de San Sebastián, tanto en su crecimiento urbano como interurbano, hoy no nos veríamos en la duda de pensar si las sucesivas y cambiantes normativas sismorresistentes vigentes desde 1968, han servido para algo más que para cumplimentar los expedientes. Desde que se publicó hasta hoy la población donostiarra se ha triplicado. La ciudad se ha ensanchado unas diez veces lo que ocupaba entonces, los planes de crecimiento urbano han contemplado en el último siglo todo, menos este fenómeno.

DISPOSICIÓN MACROESTRUCTURAL Y ZONA DE AMPLIFICACIÓN DE ONDAS SÍSMICAS DEL ÁREA METROPOLITANA


2.1 EL TERREMOTO DE PAMPLONA DE 1903

En Pamplona al menos, se da testimonio de una réplica algo más de una hora después y de desperfectos "alarmantes" en algunas edificaciones antiguas. En cuanto a la duración, la incertidumbre es mayor, D. Salvador Calderón y Arana destaca los "muchos segundos" que duró; seguramente por que los típicos temblores de tierra bien conocidos desde siempre en la zona de Pamplona, suelen ser muy cortos, de apenas 2 a 6 segundos, por lo que llamó la atención a este catedrático de Mineralogía Descriptiva un tiempo sensiblemente más largo, sin especificar, pero resaltando ese aspecto anómalo. En Sangüesa, el alcalde habla de unos veinte segundos y alarma general, en Navascués también con alarma general, de dos a tres, y el corresponsal de Lecumberri lo dilata hasta un minuto.

En San Sebastián, a 70 km, además se dan datos de que las oscilaciones fueron de Norte a Sur. Quizás éste sea el primer testimonio de la historia que refleja el marcado efecto local y de resonancia y repetición que la ciudad donostiarra desarrolla cuando se dan este tipo de fenómenos naturales. Más tarde en 1923 con el terremoto de Martes (Huesca) presentó el mismo patrón, se repitió en 1929 con el de Turruncún (La Rioja), y en 1931 D. Alfonso Rey Pastor se da cuenta de este fenómeno y lo publica con motivo del trazado de isosistas del terremoto de 1923 en su trabajo "El período sísmico de La Canal de Bedún (Pirineos) 1923-1925", entonces le adjudica a San Sebastián el calificativo de "foco periférico". Treinta y seis años después, en 1967 y en plena época instrumental pero aún sin red analógica nacional (que comienza en 1985), se repite el patrón con el impacto en la capital guipuzcoana del terremoto de Arette. San Sebastián es un foco con "emergencia de nuevas ondas de retroceso" con un marcado efecto de "resonancia macrosísmica ligado a la costa vascongada" como había apuntado O. Mengel en su tesis.

SON MUY POCOS LOS DATOS DE ESTE TERREMOTO, A PARTIR DE TESTIMONIOS Y PRENSA SE HA CALCULADO UN GRUPO DE ISOSISTAS: V-VI EN ROJO, IV EN NARANJA Y II-III EN AMARILLO. LO CURIOSO ES QUE DE ESTE TERREMOTO HAY TESTIMONIOS EN SANGÜESA, LECUMBERRI, NAVASCUÉS Y POR SUPUESTO EN LA CUENCA DE PAMPLONA, PERO TAMBIÉN EN LA CIUDAD DE SAN SEBASTIÁN.

Heraldo astorgano : periódico católico bisemanal, defensor de los intereses: Año V Vol. 605 - 1903 marzo 13
INFORMACIÓN DEL CATÁLOGO SÍSMICO DE JOSÉ GALBIS DE 1932 (TOMO I) IGN


2.2 EL TERREMOTO DE MARTES (HUESCA) DE 1923

En Pamplona golpeó con intensidad IV-V, entonces la capital de Navarra albergaba en su cuenca a 33.000 habitantes cuyo medio de vida rural y de poca movilidad los dispersaba en edificaciones bajas y de media altura, apenas se había comenzado el efecto "ensanche" de la capital; en San Sebastián por el efecto local lo hizo con V, como en Huesca; en Girona y Barcelona IV, como en Perpiñán, Logroño y Zaragoza; un efecto sombra en Álava hizo que a Vitoria llegase con intensidad II.

EL TERREMOTO DE MARTES (HUESCA) DEL DÍA 10 DE JULIO 1923 AFECTÓ A TODO EL CUADRANTE NORDESTE DE ESPAÑA Y SUR DE FRANCIA, Y ALCANZÓ UNA INTENSIDAD DESTRUCTIVA DE VIII. EN ROJO PUEDEN VERSE LAS ISOSISTAS DE V VIII, EN NARANJA IV , III EN AMARILLO Y EN AMARILLO CLARO II
EL ABC DEL DÍA 11 DE JULIO DE 1923 SE HACE ECO DEL DESASTRE, COMO SE PUEDE LEER, AÚN ERA MUY PRONTO PARA ABARCAR LA NOTICIA DE FORMA MÍNIMAMENTE CIENTÍFICA, SE MEZCLAN TORMENTAS, TEMBLORES, RÉPLICAS, TELEGRAMAS, AGUJAS DE SISMÓGRAFOS COMPORTÁNDOSE DE FORMA EXTRAÑA, EPICENTROS EN CATALUÑA, ARAGÓN O MELILLA (ESE DÍA TAMBIÉN HUBO UN TERREMOTO EN ESA CIUDAD), CASAS DAÑADAS EN MADRID; PERPIÑÁN Y BURDEOS TIEMBLAN TAMBIÉN, ETC., ETC... NO FUE SINO PASADOS UNOS MESES QUE SE PUDO DAR CON EL EPICENTRO DE MARTES, Y UNOS AÑOS HASTA QUE ALFONSO REY PASTOR ESTUDIÓ PORMENORIZADAMENTE EL EVENTO SÍSMICO QUE SE EXTENDIÓ HASTA 1925.


2.3 EL TERREMOTO DE TURRUNCÚN (LA RIOJA ) DE 1929

Al sismo de la Rioja Baja del 18 de febrero de 1929 con epicentro en Turruncún se le ha adjudicado una magnitud mblg de 5,1. Causó muchos destrozos en las zonas de alrededor, Alfonso Rey Pastor confeccionó un estudio de localización del epicentro y de isosistas. De aquel temblor en lo más profundo de La Rioja Baja, todavía hay testigos vivos. "... Los efectos se notaron en muchas localidades. En Muro de Aguas, se hundieron las chimeneas y de la fuente manaba agua muy turbia...", dice Encarnación Pérez de 92 años, que entonces tenía 13 años, pero recuerda bien el suceso: "... el movimiento fue fuerte, así que se formaron unas cuantas grietas...". En el periódico del 19 de febrero (el terremoto se registró, según los boletines del Instituto Geográfico Nacional, la tarde anterior a las 18.59 horas), se deduce que el parte de bajas fue escueto.


EL TERREMOTO DE TURRUNCÚN DEL DÍA 18 DE FEBRERO DE 1929 AFECTÓ A TODO EL CUADRANTE NORDESTE DE ESPAÑA Y SUROESTE DE FRANCIA, Y ALCANZÓ UNA INTENSIDAD DESTRUCTIVA DE VII. EN ROJO PUEDEN VERSE LAS ISOSISTAS DE V A VII, EN NARANJA IV , III EN AMARILLO Y EN AMARILLO CLARO II



ABC DEL DÍA SIGUIENTE

ABC DOS DÍAS DESPUÉS

2.4 EL TERREMOTO DE ARETTE (FRANCIA) DE 1967

El terremoto de Arette fue en el siglo XX el más grave sufrido por Francia desde el de Lambesc (Provenza) de 1909. Su magnitud llegó a Mw 5,8 con una propagación muy amplia, hasta unos 150.000 kilómetros cuadrados temblaron con más o menos intensidad; se sintió incluso en el norte de Aquitania, pero especialmente en todo el sur de Francia. En España se propagó hasta Asturias por el oeste y hasta Cataluña por el este, y hacia el sur llegó hasta Valencia. Sólo hubo una víctima, pero se contaron heridos de diversas consideraciones por centenas, muchos de ellos con importantes perjuicios y afecciones de por vida, 62 municipios fueron declarados zona catastrófica, con 2.300 edificios seriamente dañados, 350 de los cuales quedaron irreparables y hubieron de ser derribados.

En pleno valle de Baretous, la villa de Arette quedó marcada para siempre. El terremoto cambió su historia y trajo mucha desgracia a la comarca durante los primeros años, sin embargo hoy es objeto temático y fuente de resiliencia que debiera ser considerada, incluso imitada, pues ese hecho se ha convertido en una notable fuente de riqueza. Ello ha sido posible gracias a la admirable e indiscutible pericia y destreza de los mucho más cultos y avispados dirigentes franceses para resaltar sus acontecimientos históricos relevantes y rentabilizarlos como un atractivo turístico de carácter científico y cultural. Algo de lo que en España deberíamos aprender, y especialmente en esa misma línea geológica, sobre todo en comarcas cuyo potencial es mucho mayor por los altos niveles expresivos que alcanzan estos fenómenos naturales, el mejor ejemplo de Europa, si no del mundo, lo tenemos en la comarca del Jiloca, con un infinitamente más a mano y más gráfico regalo que un paraíso científico, tectónico y geomorfológico pueda ser otorgardo de forma tan abnegada por la propia Naturaleza.

Es más, la misma Lorca es otro ejemplo, su patrimonio geológico está aún virgen y no se sabe aprovechar y rentabilizar, han sido demasiados los años en los que los dirigentes murcianos sólo han practicado una cultura: la del ladrillazo, sin embargo, allí espera un tesoro y un potencial en cuanto al valor de su experiencia y medio físico que ya fue analizado por aquí y por allá, y presentado a las autoridades en su momento, ha aparecido en publicaciones y todo tipo de propuestas, pero aún duerme  encerado en los cajones de políticos sin visión ni sensibilidad; de ellos, de los franceses, nuestras débiles instituciones deberían aprender algo, está muy claro que se trata de una cuestión de cultura, una carencia muy nuestra que las poblaciones acaban pagando bastante caro por la falta de preparación de sus representantes.

Hoy, en Arette, se puede disfrutar de un parque temático con una guía científica y pedagógica que muestra en audiovisuales y paneles informativos el origen de los terremotos y la tectónica pirenaica, los encuentros de las placas euroasiáticas y africana, así como el juego de las fallas y sus efectos en la península ibérica en su choque con la subplaca aquitana, también sus consecuencias y sus recurrencias históricas, y ya de paso se muestran los atractivos turísticos, paisajísticos, gastronómicos y deportivos de la zona.

EL TERREMOTO DE ARETTE (5,8) DE AGOSTO DE 1967 AFECTÓ A TODO EL CUADRANTE NORDESTE DE ESPAÑA Y SUROESTE DE FRANCIA, Y ALCANZÓ UNA INTENSIDAD DESTRUCTIVA DE VIII. FUE ESPECIALMENTE VIOLENTO EN SAN SEBASTIÁN, UNA VEZ MÁS EL TERRENO BAJO LA CIUDAD DONOSTIARRA SE COMPORTÓ COMO UNA CAJA DE RESONANCIA Y REPITIÓ EL PATRÓN DE LOS IMPACTOS DE 1923 Y 1929. SI EN 1967 YA ERA LA TERCERA (O LA CUARTA SI INCLUIMOS PAMPLONA 1903) VEZ QUE OCURRÍA ¿CÓMO ES QUE DICHA MACROESTRUCTURA NO HA SIDO TODAVÍA OBJETO DE UN ESTUDIO DEDICADO?, ¿Y SI UN EVENTO COMO EL DE 1817 DE ARNEDO SE VOLVIESE A DESENCADENAR? HOY UNOS 450.000 HABITANTES VIVEN SOBRE UNA CIRCUNSCRIPCIÓN GEOLÓGICA QUE POR ALGUNA RAZÓN AÚN NO ESTUDIADA PRODUCE UN EFECTO LOCAL ACUSADO Y QUE DURANTE EL SIGLO XX, SE EXPERIMENTÓ EN TRES O MÁS OCASIONES. EN ROJO PUEDEN VERSE LAS ISOSISTAS DE V A VIII, EN NARANJA IV , III EN AMARILLO Y EN AMARILLO CLARO II
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3. CONCLUSIONES

1. Los cuatro terremotos comentados muestran un patrón común en San Sebastián que ya debería haberse tenido muy en cuenta en las sucesivas distribuciones de la ciudad, no sólo afectaba a Txominenea, que es lo que estábamos estudiando, y que es comprensible por su asentamiento sobre una cubeta cuaternaria (una caja de resonancia), la sorpresa vino de la certeza que vemos demostrada de que toda la circunscripción física sobre la que se asienta San Sebastián y su área metropolitana, incluidos buena parte de Lasarte, Andoáin, Martutene, Loiola..., y sobre todo la parte oriental prácticamente hasta Hendaya, se comporta claramente como un “frontón sísmico” o como una suerte de “aspiradora” que recoge y amplifica las ondas de impactos externos. Desde el Sur (Pamplona 1903 y Turruncún 1929), desde el sureste (Martes 1923) y desde el este (Arette 1967) el patrón es similar, los cuatro eventos tienen una incidencia especial en la ciuad donostiarra. 

2. Sorprendentemente, posteriores revisiones de hemeroteca de las noticias de los terremotos de Lizarraga (5,2) de 1998, de Lizoáin y de Nagore (5,3-5,2 respectivamente) de 2004, repetían buena parte del patrón; era de destacar que siempre y de forma persistente es en San Sebastián donde se notan especialmente los impactos, aún estando tan lejos de los epicentros, incluso muy por encima de poblaciones mucho más cercanas en el camino que las ondas deben atravesar como Irúrzun, Leiza, Tolosa, Azpeitia, Zumárraga... 

3. Intentando desenmascarar el porqué, revisamos las macroestructuras geológicas ligadas a los movimientos alpídicos finales, y sobre todo los del último Oligoceno, pero las explicaciones pueden ser varias. No obstante, sea cual fuere la (o las características si hay varias) que originan esa peculiaridad de comportamiento, el fenómeno es merecedor de un estudio dedicado, por otro lado sorprende su manifiesta presencia que ya salió a la luz a lo largo del siglo XX en más de cuatro ocasiones y que (creemos), aún nadie había advertido hasta que los vecinos de Txomin nos involucraron en sus temores e inseguridades. Es algo que ya no puede dejarse pasar.

LA GEOLOGÍA DE SAN SEBASTIÁN DISPUESTA CON LOS MATERIALES PARALELOS A LA COSTA Y CON LA CIUDAD SOBRE UNA CUBETA CUATERNARIA

LEYENDA
4. Mucha es la bibliografía sísmica vasca y navarra en que hemos buscado, el tema no aparece por ningún lado a pesar de su manifiesta rotundidad y su empecinada insistencia en más de cien años en mostrarse a los ojos de los estudiosos. Tal vez ahora al desvelarlo, se tome más en consideración por la parte que nos toca a los técnicos, pero sobre todo por mor del conocimiento más profundo que tal fenómeno se merece de parte de la representación ciudadana donostiarra y vasca, podría tratarse de una espada de Damocles más, pero totalmente evitable si se estudiase a fondo, aunque alguno pensará que hubiera sido mejor seguir manteniéndolo oculto, pero es que tarde o temprano iba a aparecer ante los ojos de algún estudioso, y mejor que lo haya hecho así, que no como lo hizo el barrio de San Fernando, o el de La Viña de Lorca, ambos los más afectados y lejanos al epicentro, pero con un clarísimo efecto local, entre otros efectos que estudiamos allí, y que ahora se desvela también en San Sebastián a la luz de los mapas de isosistas publicados por el IGN. 

5. Persisten los prejuicios en los círculos incluso especializados: ingenieriles, arquitectónicos y urbanistas de que los terremotos graves se dan sólo en el Sur. Los esfuerzos compresivos ligados a la tectónica ibérica, y por lo tanto a los Pirineos son, razonablemente, mayores en las zonas del sur peninsular, es verdad, éstos se van amortiguando progresivamente hacia el Norte. Pero la geología no es tan sencilla, en zonas con una compleja historia geológica y con la corteza muy fracturada (y por tanto más débil) como son los Pirineos, Cameros, y las cuencas de Pamplona y Vitoria, la energía se liberará más fácilmente, lo que explica el incremento de sismicidad en los Pirineos en comparación con otras zonas del Sur. La compleja transmisión de esfuerzos por el interior de la península deriva también en que se produzcan terremotos interiores, como los de Pedro Muñoz (Ciudad Real) en agosto de 2007, de magnitud 5,1 o los numerosos terremotos gallegos de 1995 a 1997 de hasta 5,2 y 5,3. 

6. Los Pirineos constituyen la segunda región con más sismicidad de la península Ibérica. La causa de la actividad de las fallas que producen los terremotos hay que buscarla en la conjunción de la extensión neógena que afecta la zona oriental y la compensación isostática heterogénea que se va produciendo por el levantamiento y erosión de la propia cordillera. La mayor concentración de sismicidad se da en una franja E-W de unos 80 km de longitud y 20 de anchura, que se extiende entre las poblaciones de Bagnéres de Bigorre y Arette. Esta zona ha sufrido varios terremotos destructivos. Destacan los de Juncalas, cerca de Lourdes (VIII) en 1750, el visto de Arette (5,8) en 1967 y Arudy (5,4) en 1980. En esta región varios autores franceses han descrito fallas, de dirección E-W con muy claras expresiones geomorfológicas de actividad reciente bien manifiesta. Hay terremotos pirenaicos históricos que han llegado a 6 y 7 de magnitud. En la madrugada del 3 de febrero de 1373 ocurrió un terremoto  de intensidad IX, con una magnitud estimada cercana a 6,5 y que se sintió hasta 400 km de distancia. En Barcelona cayó parte del campanario de la joya gótica de Santa María del Mar, que estaba en construcción, este acontecimiento se recoge en la novela “La catedral del mar” de Ildefonso Falcones. 

LOS TERRENOS CUATERNARIOS DE LAS VEGAS Y TERRAZAS HACEN DE "LUPAS", TAL ES EL CASO DEL BARRIO DE SAN FERNANDO O DE LA VIÑA EN LORCA; ADEMÁS DE ESTE DENOMINADO EFECTO LOCAL, SE PRODUCE UN ECO SÍSMICO QUE HACE QUE LA CUBETA O "CAJA" QUE CONTIENEN A ESOS MATERIALES CUATERNARIOS, SE COMPORTE COMO UNA "CAJA DE RESONANCIA": LA ONDA REBOTA EN LAS PAREDES DE LA "CAJA" Y BARRE LA ZONA EN VARIAS DIRECCIONES HASTA QUE SE DISIPA, POR ESO EN LA VIÑA, ALGUNAS PERSONAS TUVIERON LA PERCEPCIÓN SUBJETIVA DE UN TERREMOTO ALGO MÁS LARGO QUE EN OTRAS ZONAS DE LORCA, EN LA VEGA DE GRANADA, ESTE EFECTO TAMBIÉN SE DIO CUANDO EL TERREMOTO DE ALBOLOTE DE 1956.



7. En la zona central de Iberia, los epicentros parecen concentrarse cerca de la fosa del Jiloca, en el sector meridional de la fosa de Teruel y en los macizos de Albarracín y Javalambre. Antes de que hubiera instrumentación para medir las energías desencadenadas, hay registradas intensidades de VIII en el sur de la fosa de Teruel (Ademuz, 1656), VI-VII en Albarracín (1848) y VII en Used, (4,7-5,2) por la Falla del Jiloca (1953).

8. Sin embargo, uno de los focos que muestra claramente un comportamiento de ampificación y efecto local en la ciudad de San Sebastián, con bastante más amplificación y violencia que el de Pamplona de 1903 vino desde el Sur, concretamente se presentó en el sector noroccidental de la cadena montañosa central: en la sierra de Cameros, donde se han registrado varios terremotos de intensidad destructiva entre VII y VIII en los dos últimos siglos: Arnedo (1817) al que se le estiman magnitudes entre 5,8 y 6,9, Turruncún (1929) con 5,1 y Aguilar del Río Alhama (1961) al que se le adjudican desde 4,6 hasta 5,8 y una intensidad destructiva de VIII. Esta, creemos, debería ser la zona de generación de impactos más temible al igual que la zona de Arette y Bagnéres de Bigorre. Por lo que pensar que los daños sísmicos que pudiera sufrir la ciudad donostiarra vendrían solamente de los Pirineos es un error. No se ha estudiado a fondo la direccionalidad

ALINEACIÓN DE LOS TERREMOTOS RIOJANOS MÁS SIGNIFICACTIVOS CON EL CABALGAMIENTO C. EBRO-C. CAMEROS

9. Aunque los epicentros de los dos primeros focos de 1817 (5,8-6,9- VII-VIII) y de 1929 (5,1-VIII)  se hallan próximos al frente del cabalgamiento de Cameros, aún no se tiene certeza de qué fallas concretas los causaron, tampoco existen estudios dedicados con apenas evidencias de fallas activas en este sector, cuando es tan manifiesta su presencia y actividad; más de un millón de personas en Navarra, La Rioja y Euskadi podrían cualquier día verse afectadas. Una más de las consecuencias de las fronteras autonómicas y administrativas para los estudios científicos enfocados a salvar vidas y evitar desgracias: entorpecen a la hora de estudiar fenómenos que no conocen fronteras y que como las ondas sísmicas no respetan criterios administrativos, la Naturaleza cuando golpea no distingue ni nacionalidad ni autonomía. ¿Cuándo se van a enterar nuestros dirigentes?

ZONAS SISMOGENÉTICAS ASOCIADAS A LOS PIRINEOS Y POTENCIAL MAGNITUD Mw QUE PODRÍAN GENERAR

10. Por ejemplo, la fosa del Jiloca es la mejor conocida de entre las fallas activas de la Cordillera Ibérica. Por sí sola es un museo sin igual en el mundo entero, y aún sin rendir desde el punto de vista del turismo científico y cultural por culpa de unos dirigentes faltos de imaginación y recursos culturales, pero con un potencial innegable si se sabe desarrollar, algo que se analiza aquí. Esas fallas, cortan de cuajo la cuenca de Teruel, produciendo en su nivel de colmatación un desplazamiento neto de unos 300 m, con una tasa media de movimiento visible tanto para especialistas como para los amantes de estos fenómenos de 0,07-0,08 mm/año. Se han obtenido tasas parciales de hasta 0,33 mm/año. Se han podido identificar un total de nueve paleosismos asociados a esta falla entre 75.000 y 15.000 años, con periodos intersísmicos que van de 4.000 a 11.000 años, desplazamientos estimados desde 0,6 a 2,7 m, y magnitudes potenciales cercanas a 7 (Simón et al., 2011). ¿Cuándo se van a realizar campañas similares en aquellas fallas pirenaicas y de La Rioja Baja que pueden suponer un peligro para la población? Recordemos que un área ligada a la zona tectónica pirenaica: la Cuenca de Pamplona, aglutina ya a 350.000 habitantes.

11. Además cuando unos dirigentes despiertos y consecuentes lo abarquen, la tarea no será fácil, por si el entorpecimiento administrativo era poco, la península Ibérica se sitúa en un límite de placas bastante difuso. Los 5 mm/año de convergencia entre las placas africana y euroasiática no se concentran en una sola falla activa, sino que se reparten en multitud de ellas, algunas a lo peor ni se conocen. La Falla de Alhama de Murcia (FAM), que mató, arruinó la vida, el patrimonio, la economía y en algunos casos dañó de por vida a personas y sectores económicos enteros, se descubrió en 1979. Las fallas de nuestra zona, yacen como unas fichas de dominó descansando horizontalmente.

1854 FUE UN AÑO ESPECIALMENTE INTENSO EN LA ZONA PIRENAICA, EL TOMO V DE LA REVISTA MINERA SE HACE ECO DE VARIOS TERREMOTOS EN LA ZONA FRANCESA Y ESPAÑOLA, DESDE IRÚN HASTA GERONA, ES DE DESTACAR EL MES DE JULIO, EL DÍA DE SAN JOSÉ DE 1854 VARIAS SACUDIDAS AFECTARON A DONOSTIA.

12. Por lo tanto, para desvanecer prejuicios, baste apuntar que aunque los periodos de recurrencia para un único segmento de falla sean de varios miles de años (ver la Falla del Jiloca, la mejor estudiada), al existir muchas fallas activas, el periodo de recurrencia de grandes terremotos en el conjunto de toda la península es mucho menor, de apenas un centenar de años para terremotos con consecuencias catastróficas. Tiempo más que suficiente para caer en una amnesia sísmica y volver a tropezar con la misma piedra. Eso explica que en los últimos 650 años de registro histórico e instrumental, se hayan producido terremotos con un gran número de víctimas como los de Villarreal de la Canal (Huesca) de 1357, cerca de Martes (con un número indeterminado de víctimas, pero parece ser que más de una centena; destruyó completamente tres pueblos), el de Baza en 1531 (casi 400 muertos), Vera en 1518 (165 muertos), Torrevieja en 1829 (389 muertos) o Alhama de Granada en 1884 (casi 1.200 muertos).

CUANDO ALFONSO REY PASTOR DEDUJO EL CLARÍSIMO EFECTO LOCAL SÍSMICO QUE SE PRODUCÍA BAJO LA CIUDAD DE SAN SEBASTIÁN, ÉSTA APENAS ALBERGABA A 65.000 PERSONAS, HOY EL ÁREA METROPOLITANA AGLUTINA A CERCA DE 450.000. MOTIVO MÁS QUE SUFICIENTE PARA ABARCAR UN ESTUDIO DEL FENÓMENO SÍSMICO LOCAL.

13. Pero lo más trágico y que venimos anunciando desde hace años, es no sólo que algunas de las fallas activas de la península se sitúan bajo (o muy próximas a) núcleos de población, como ha sido el caso de Lorca, sino que como ya sucediera en el pasado en varias ocasiones como en Torrevieja, Vera, el mismo barrio de La Viña y el de San Fernando de Lorca, en Turrucún, en Reocín, etc., San Sebastián, por lo que hemos detectado, muestra que terremotos con una relativamente pequeña magnitud pueden acarrear consecuencias mayores, no se trata de alarmar, pero sí de estar prevenidos y al menos conocer a fondo el terreno sobre el que se vive, su distribución, su dinámica y los riesgos potenciales que encierra. También este fenómeno se detectó, en algunas localidades por primera vez, en los terremotos de Lorca y Albolote (Granada), que en 1956 ocasionó 12 víctimas mortales, a pesar de que ambos terremotos tuvieron una relativa baja magnitud (5,0 en el caso de Albolote y 5,2 en el caso de Lorca).

14. El Gobierno Vasco ha presentado recientemente a los ayuntamientos el inventario y el diagnóstico de las necesidades de intervención del parque edificado. El trabajo, realizado por Tecnalia y las Escuelas de Arquitectura de San Sebastián y Madrid, ha consistido en la obtención de un inventario y diagnóstico a escala de sección censal, de las edificaciones residenciales construidas antes de 1980 y su entorno urbano. Con este inventario, primero que se realiza en Euskadi, se pretende poder definir las estrategias de rehabilitación y poder establecer las prioridades y estrategias de intervención. Los parámetros de vulnerabilidad seleccionados han sido la vulnerabilidad social (origen, edad, formación. renta), estabilidad (antigüedad, estructura. tamaño), habitabilidad (superficie, dotaciones, ratio de habitantes), accesibilidad y eficiencia energética. Los indicadores que se han tenido en cuenta han sido 65. Sería oportuno y necesario incluir la vulnerabilidad a sismo dentro de la estabilidad general que se analice a partir de ahora, una labor que entre otras, debería estar mucho más controlada. Especialmente debería aplicarse a aquellos edificios construidos antes de 1968, cuando no había ningún criterio antisísmico a la hora de construir ni urbanizar.

15. Finalmente queda añadir que en la historia más reciente de España hemos aprendido a base de desgracias, ha sido hasta ahora nuestro sino, antes que dar importancia a estas cuestiones y abarcarlas como se merecen, dejamos que se produzca una catástrofe, y que los geólogos mejor formados se vayan a Canadá, a Australia o a Brasil; luego buscamos culpables, nos acusamos unos a otros, ponemos unos parches, y volvemos a olvidarnos del tema y así hasta la próxima. El gran cambio o si se quiere, el gran reto (o problema) es que las ciudades del siglo XXI nada tienen que ver ya con las que eran cuando en 1903, 1923, 1929 ó 1967, terremotos de mediana intensidad impactaron en ciudades de la geografía ibérica con más o menos violencia. San Sebastián ya ha mostrado al menos cuatro veces que posee una configuración geológica peculiar, que es capaz de amplificar y convertir su subsuelo en un foco repetidor periférico de terremotos más o menos lejanos.

¿ERA DONOSTI LA BELLA EASO?
EN DIARIO VASCO CON MOTIVO DE LAS X JORNADAS DE RIESGOS Y EMERGENCIAS
(DOBLE CLIC EN LA IMAGEN PARA AGRANDAR)


¿PODRÍA OCURRIR AQUÍ? ETB2

CONFERENCIA SOBRE LA NCSE02 EN LORCA

1 comentario:

Unknown dijo...

Sumamente interesante. Soy de Donosti, pero vivo en Puerto Rico, donde estamos eniendo terremotos notables procedentes de la actividad de una falla (Montalba) que la Red Sismica local dice que desconocía. Recuerdo muy bien el terremoto de Arette: estábamos viendo los fuegos artificiales desde una casa en Miraconcha, cuando sonó el teléfono: era la hija de los dueños de la casa, que decía que "estaba bien" y a ver si nosotros también lo estábamos. Nos quedamos perplejos, porque nosotros no solamente no notamos nada, sino que en el momento del temblor estábamos opinando sobre la estética de una lámpara de techo llena de cristalitos. No se movió la lámpara. Ni los cristalitos. Al bajar para casa (en coche), vimos bastante gente por la calle, como en pijama algunos, y escaparates con artículos caídos. No nos dimos cuenta de lo que había sido. Los comentarios mejor me los envías al sitio cifutorress@yahoo.com , que es el sitio que uso.